En una de esas búsquedas de ofertas que hago de vez en cuando aunque no necesite nada me saltó a las narices un par de cables USB-C de la marca Rophie por tan solo 3€. Además, los vendía Amazon.
Ante este precio de risa y, aunque no me hicieran mucha falta, los pedí y al día siguiente los tenía en casa.
Eran una pareja de cables trenzados de dos longitudes diferentes. Uno es de 50 centímetros y el otro de 1,80 metros. Venían en una bolsa de plástico translúcido:
Y en el otro lado la bolsa traía esta parrafada diciendo que son los mejores del mundo y otras chorradas:
El cable más corto, de 50 centímetros, es el que podemos ver en las siguientes dos fotografías:
El más largo, de 1,80 metros es este:
El conector USB-C es este:
No hay mucho más que añadir a esta entrada. Los cables son de buena calidad, aunque muy rígidos, ya que son trenzados. Eso es una ventaja, porque la calidad de la transmisión de datos es mejor, pero a la vez es un inconveniente, ya que les falta algo de flexibilidad. La calidad de las conexiones también parece buena, algo superior a la media habitual.
En cualquier caso, por 3€ el pack de dos cables es un producto muy recomendable.