Durante los meses de confinamiento muchas personas nos vimos en la necesidad de seguir con nuestro trabajo a distancia. Para ello se hicieron indispensables los PCs, tablets, móviles y otros dispositivos. En mi caso, dispongo de un PC de sobremesa, que tiene su teclado y ratón inalámbricos y es cómodo para trabajar. También tengo un antiguo portátil que aún cumple su función, aunque se usa muy esporádicamente. Ya que en el confinamiento se hizo necesario el uso de los dos ordenadores a la vez, me di cuenta de lo incómodo que es trabajar en un portátil sin un teclado y ratón adecuados. Con el teclado me puedo apañar, pero usar el touchpad para trabajar se me hacía muy molesto.
Encontré una oferta de un ratón inalámbrico muy barato en uno de los canales de chollos de Telegram que he mencionado muchas veces el blog. El ratón en cuestión no tenía ni marca conocida, funcionaba a pilas y no tenía demasiada buena pinta, pero costaba 3,95€ (en abril de 2020), así que lo pedí.
Llegó en pocos días pese a estar confinados y no tenía ni siquiera una caja. Venía en una bolsa de plástico con burbujas y lo saqué y me encontré con esto:
Como se puede ver en la foto, tampoco tiene demasiada mala pinta. En las fotos que vie antes de pedirlo el plástico parecía peor acabado.
Salvando todas las distancias, intenta ser una copia del ratón que acompaña a los equipos Apple de sobremesa.
Aquí podemos verlo desde otro lado:
Aquí vemos con un poco más de detalle la rueda y el botón marcado con el texto «DPI»:
Le damos la vuelta y vemos la tapa de las pilas y el sensor óptico:
Abrimos la tapa y vemos que en el alojamiento de las pilas está su receptor USB:
Sacamos el receptor USB y vemos el hueco para las dos pilas AAA:
El receptor USB es muy pequeño y propietario de este ratón, así que si lo perdemos, nos quedamos sin ratón:
Introducimos las pilas en el compartimento y vemos que se ilumina el sensor óptico en color rojo:
Como puede verse en la foto anterior usé un par de pilas recargables del LIDL.
El ratón no necesita drivers y, con solo conectar el receptor al PC ya lo detecta. El funcionamiento es sorprendentemente bueno para tratarse de un ratón de este precio. La rueda y los botones funcionan bien y el desplazamiento del cursor es bueno. El alcance inalámbrico no es muy grande y, a un par de metros, ya empiezan las interferencias, pero es comprensible al tratarse de un dispositivo tan barato. La luz roja interna se ve en casi todo el ratón, ya que el plástico blanco con el que está hecho es translúcido, pero no es nada molesto.
Para el uso que yo le he estado dando, que es mejorar el trabajo con un ordenador portátil ha cumplido perfectamente y, después de varios meses de uso, sigue funcionando como el primer día. Además, el consumo de las pilas es muy comedido, ya que se apaga automáticamente cuando no hay actividad o no está encendido el PC. En unos 5 meses de uso no ha hecho falta cambiárselas pese a ser recargables, que siempre tienen un periodo de descarga más breve.
Lo recomendaría sin dudas para un uso esporádico y como ratón «de batalla» para tener un repuesto en caso de que falle nuestro ratón principal.